Sus organizadores señalan que la educación crítica, como teoría y movimiento, está ganando importancia en un momento de crisis económica, con una educación sitiada por el capitalismo neoliberal, el (neo) conservadurismo y el nacionalismo agresivo. A esto se suma la proletarización de profesores, la criminalización de la juventud y escuelas y universidades que se han convertido en mercancías.
En este contexto, las comunidades internacionales de educadores críticos están construyendo resistencia a estos procesos y están fomentando un cambio social que conduzca a una sociedad más justa y equitativa.
La académica y coordinadora de investigación del DEP María Teresa Flórez presentó la ponencia “El disputado campo de la evaluación”, basada en su tesis doctoral aprobada exitosamente en 2014 en la Universidad de Oxford. Este trabajo estudia las reformas en el ámbito de la evaluación en Chile desde una perspectiva ideológica, histórica y (poli) sistémica.
Flórez abordó las conclusiones en torno a las conexiones entre las políticas de evaluación y modelos específicos de la educación y la sociedad, junto sistemas de evaluación de alto impacto como una barrera histórica para el cambio curricular y pedagógico. Basándose en el análisis crítico del discurso, intertextualidad y teoría de poli sistemas aplicadas a los documentos y entrevistas con profesores y los responsables de políticas públicas, el estudio sostiene que hay un patrón histórico donde las ideas más igualitarias y emancipatorias introducidas por diferentes actores en diferentes periodos han fracasado en su intento de convertirse en hegemónica debido a las tecnologías de evaluación de alto impacto que orientan el sistema hacia una idea funcional, centrada en el éxito y mecanicista de la educación y de la sociedad.